DIARIO LITORAL DE LA CIUDAD DE CORRIENTES
RECLAMAN HUMILDAD Y GRANDEZA DE ESPIRITU A LOS DIRIGENTES
Religiosos exigen diálogo, consenso y políticas de Estado contra la pobrezaFecha Publicación: Jueves, 03 de Septiembre de 2009Líderes espirituales de distintas religiones con participación en Corrientes opinaron acerca del flagelo de la pauperización social y ofrecieron algunas propuestas. Reclaman compromiso de la clase dirigente, pero se comprometen a construir una agenda común con un oído en la gente y el otro en sus credos. Coinciden en que resulta imprescindible bosquejar una política común de aplicación obligatoria.La diferencia es sólo de credos, pues a la hora de elaborar o sugerir acciones surge naturalmente algo que puede llamarse unanimidad. Es la conclusión a la que arribó El Litoral luego de consultar acerca del flagelo de la pobreza a líderes espirituales de Corrientes, desde curas católicos hasta ministros afroumbandistas que mantienen contacto casi diario con la gente más necesitada.Con matices en la apreciación, todos consideran que la pobreza es un tema central para la agenda pública, que también los involucra. Y tal vez por su condición de líderes espirituales, hacen hincapié en el contacto con la gente, en el diálogo, en el consenso, en el escuchar al otro para no decidir desde el desconocimiento o la mera teoría.Esta es una nota que trata de descifrar qué piensan los referentes de distintas religiones acerca de la pobreza.
La Iglesia Católica, a través del Papa Benedicto XVI, el cardenal Jorge Bergoglio y el arzobispo Andrés Stanovnik, insistió en los últimos días en la necesidad de desterrar “el escándalo de la pobreza” en la Argentina y en Corrientes. Y pidió mayor compromiso a los gobernantes y candidatos, en el caso particular de la provincia.
Los religiosos correntinos consultados para este trabajo coinciden en la urgencia y, cada uno por su parte, propone escuchar más, dialogar más, consensuar más, armar mesas de diálogo, y, si se puede, discutir una especie de “Acuerdo Social” como política de Estado de aplicación obligatoria para los gobernantes.La tarea es difícil, pero no imposible para estos hombres y mujeres que se entusiasman desde su anhelo y voluntad de construcción cívica y social.
Iglesia CatólicaApostólica RomanaPadre Rubén Barrios. Párroco, Iglesia Inmaculada Concepción-Concepción, Corrientes.“El diagnóstico de la Iglesia Católica sobre la pobreza no es caprichoso. Se trata de un tema central producto de la fragmentación social que atenta contra la paz y el destino de Nación”.“Nuestros obispos, en el documento de Aparecida, ya nos hablan de los excluidos como “sobrantes” que, si no son contenidos, tarde o temprano generarán situaciones conflictivas de imprevisibles consecuencias. Atentamos contra la paz y abonamos el camino de la violencia si no hacemos nada para combatir la pobreza”, remarcó.“La Iglesia quiere acompañar. Es amiga de todos aquellos que buscan el bien común. Debemos ayudar ahora a recuperar los valores y a volver a hablar de solidaridad, de compartir, de consensuar”.“Debemos generar políticas de Estado, promover el consenso para escribir un “Acuerdo Social” que sea de aplicación obligatoria gobierne quien gobierne. Para ello necesitamos y pedimos grandeza de espíritu a nuestros dirigentes”, terminó.
Delegación de AsociacionesIsraelitas ArgentinasSamuel Tolcachier. Daia-Corrientes.Fue consultado pero prefirió no opinar. Dijo que la Daia Argentina es quien define los postulados acerca de temas como la pobreza.La Daia Corrientes, no obstante, formó parte de la Junta Coordinadora de la Red de Organizaciones No Gubernamentales que en su momento se manifestó respecto del tema reconociendo que “los índices de pobreza nos siguen manteniendo como una provincia marginal y tenemos necesidades básicas insatisfechas de las más altas del país, porque, entre otras cuestiones, los problemas sociales de Corrientes no fueron atacados de raíz”.
Religión Tradicional Yoruba:Pai Rogelio Benítez.Rogelio Benítez tiene opinión formada respecto de la pobreza y cómo combatirla, pero prefirió no hablar esta vez por su participación en política. Benítez fue precandidato a gobernador por una línea interna del Partido Justicialista.
Religión Afroumbandista Ministra Miriam Krakowski. Yialorisha Miriam ti Oya.“La pobreza nos afecta a todos y el primer gran paso que hay que dar para combatirla consiste en reconocer el problema como tal, como un flagelo generalizado”, aseguró la religiosa umbandista.Criticó también a la Iglesia Católica por hablar mucho y no hacer tanto. Consideró que los líderes espirituales deben acercarse más a la gente, escucharlos, acompañarlos, aliviar su desesperanza.Para la ministra, “primero hay que reconocer la pobreza como tal, los males que trae aparejado y luego compartir el trabajo de buscar la solución pero partiendo de la comprensión del dolor ajeno”.
IglesiaEvangélicaPastor Sergio Díaz (Vicepresidente-Confraternidad de Pastores Evangélicos)“La pobreza es un tema que nos concierne a todos, no sólo en el país, pero es sólo uno de los temas. Ligada a la pobreza están otros asuntos, como la falta de trabajo, de educación, de salud. No existe bienestar general, por lo que resulta imperioso generar políticas de Estado”.Aseguró que los que deciden muchas veces pierden sensibilidad porque no tratan con la gente, lo cual posibilita que se tomen decisiones incorrectas.Propone crear mesas de diálogo “para que entre todos nos escuchemos”. “No sirve sólo hablar con los técnicos. Hay que escuchar a la gente común, a los líderes sociales, religiosos. Es complejo el tema pero todos tenemos que ayudar a plantear un programa y exigir su aplicación sin que importe quien gobierne”.
Iglesia Adventista del Séptimo Día Pastor Darío Caviglione (Presidente-Región Noreste de Argentina)“Si bien hay quienes son culpables de su propia condición, buena parte de las personas pobres y sus familias se encuentran desamparadas por eventos políticos, económicos, culturales y sociales, que en su mayor parte están fuera de su control. Vivimos en un mundo que cada vez está más enfermo por el pecado, y la pobreza es uno de los síntomas”.“La pobreza es un terreno fértil para una cantidad de otros males, como sentimientos de desesperanza, alienación y de resentimiento, que a veces conducen a actitudes y conductas antisociales”, añadió.En ese marco, recordó que “la Iglesia Adventista del Séptimo Día está involucrada con la misión de servir, usando como base las orientaciones de la Santa Biblia. Hay más de trece mil puestos de Acción Solidaria Adventista en América del Sur. Y por medio de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (Adra), se llevan adelante proyectos para atender a los necesitados en todo el mundo”. (EOL).